Una película thriller de terror sobrenatural que se centra en la vida de Albert (David Reid) y Rose Poe (Cari Moskow), una pareja casada que hace siete años cumplieron uno de sus más grandes sueños y se compraron la casa deseada en Greenfield, Carolina del Norte. Ahí durante algunos años vivieron una vida feliz y tranquila a lado de sus dos hijas Addi (Arielle Breslerman) y Jade (Ariana Baron) quienes hacían que la casa siempre estuviera llena de risas y travesuras.
Un día de repelente, hace casi exactamente un año las hijas de ambos mueren dentro de la casa en condiciones sumamente extrañas, a partir de ello se convertirán en una pareja totalmente inmersa en la desolación y el dolor de haber perdido parte de su vida, aun así tratarán de continuar sus vidas sin ellas. Rose por su parte hace el intento de dejar ir a las niñas y volver a empezar aunque se le hace difícil muchas veces, Albert por su parte casi está en mejores condiciones que Rose. Faltan cuatro días para que se cumpla el primer año de fallecimiento de ambas niñas, día que por cierto también cumplían años, a medida que los días avanzan, dentro de la casa se desencadenan hechos muy extraños, Rose de pronto sentirá escuchar voces extrañas muy parecidas a las de sus hijas dentro de la casa, pequeños susurros que llevaran a Rose al ático, el buscar dentro de ese lugar la llevará al descubrimiento de un antiguo manuscrito que al parecer pertenecía al anterior dueño de la casa, a partir de entonces muchos secretos impactantes se verán revelados, dándose cuenta así que la relación entre la muerte de las niñas y la casa es muy estrecha pues algo mucho más siniestro se encuentra sucediendo dentro de la casa que hace relación con la muerte de estas niñas.